Hace ya unos cuantos años tomaste la decisión de realizar una mamoplastia de aumento. Es posible que hace unos años te dejaras llevar por alguna oferta. Puesto que por aquella época surgió un boom en lo que se refiere a tratamientos de estética, siendo la mamoplastia de aumento el tratamiento estrella. En estos momentos estamos notando un aumento considerable a lo que se refiera a mujeres que llegan a nuestra clínica consultándonos por una mamoplastia secundaria. Mujeres que no se encuentran satisfechas con el resultado que obtuvieron, o que ya no están contentas puesto que han sufrido algún tipo de problema con la prótesis.
Es normal tendiendo en cuenta que cada vez hay más mujeres que se han intervenido de cirugía mamaria. Por tanto, el porcentaje de personas que necesitan una reintervención también a aumentado considerablemente.
También nos encontramos con un gran número de mujeres que tienen las prótesis ya muchos años, se requiere un seguimiento. Y en algunos casos las prótesis necesitan cambiarse ya que sufren desperfecciones o roturas.
Puesto que nosotros tenemos formación en cirugía reparadora, es fácil que las pacientes acudan a nuestra clínica en busca de una respuesta a su problema. Si bien es cierto, que la cirugía secundaria es más complicada. Pero nuestra experiencia ofrece a nuestras pacientes una amplia gama de soluciones.
Cuáles son las principales causas de la segunda reparación de pecho
Son casos más complicados de tratar, ya que no se dispone de cierta información como la forma original de la mama. Debemos eliminar el implante antes de poder evaluar cual es la técnica que mejor irá a la paciente.
Los principales problemas son los siguientes:
– Deformación del implante
– Rotura del mismo implante. En el caso de implantes de cuarta generación y que lleven en el cuerpo ya más de 10 años.
– Rippling, el implante se ve parcialmente debido a una mala colocación, o que el implante sea mayor que la base del pecho. O que se haya producido una atrofia de la glándula.
– Contractura muscular, es dolorosa y además conlleva malformaciones en el pecho.
– Malposición, suele darse en el caso de implantes submusculares, que quedan más altos que el pecho puesto que la glándula puede resvalar sobre el mismo.
– Envejecimiento, con el paso de los años es normal que la mama cambie de forma y de volumen.
– Casos en los que cuando se era joven se practicó una reducción de mamas y con la edad se ha perdido mucho volumen y requieren la colocación de un implante.
En la mayoría de los casos se solventa haciendo una mastopexia o rehaciéndola si ya estuviera hecha. Pero cabe señalar, que son intervenciones más complicadas y se deben de estudiar en profundidad. Ya que no es siempre posible que tras la intervención se obtenga el aspecto de la mama original. Aunque siempre nos encontramos con casos en los que la mejora tras la segunda intervención está clarísima.
Quiero quitarme los implantes
También nos encontramos con muchos casos en los que las pacientes ya no desean llevar implantes y quieren eliminarlos. En estos casos también se puede recomendar una segunda intervención. Siempre depende del volumen de la mama y de los gustos de la propia paciente. En algunos casos recomendamos el lipofiling, que es rellenar la mama con la grasa de nuestro propio cuerpo, evitando la mama muy vacía y mucha piel sobrante. Estos casos brindan resultados altamente satisfactorios, pero siempre hay que evaluar cada caso con precisión y de forma aislada.
¿Necesitas una segunda operación de pecho?
Si necesitas una segunda operación de pecho en Silfid somos especialistas en cirugía reparadora, podemos ayudarte e informarte de cuáles son tus opciones. Somos la unidad de referencia de la clínica Vistahermosa en toda España, y ofrecemos garantías y profesionalidad.
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