Lóbulos rasgados
Los lóbulos rasgado son uno de los problemas más frecuentes de los portadores de pendientes.
Se producen por el uso de pendientes de gran tamaño (que pueden engancharse en la ropa y desgarrar el lóbulo de la oreja) y por el peso, que pueden progresivamente ir dilatando y, literalmente, rasgando el lóbulo.
Por otro lado el uso de sistemas dilatadores (piercing dilatadores) desarrolla un aumento progresivo del tamaño del lóbulo auricular, así como de su agujero.
Tanto en defectos parciales (desgarres parciales) como totales, el uso de pendientes se hace imposible, dado que el pendiente no se puede sostener en el lóbulo rasgado.
La cirugía de reconstrucción de los lóbulos rasgados o dilatados es un procedimiento mínimamente invasivo que se realiza bajo anestesia local. En ella se reseca el tejido (piel) que se haya producido por la dilatación y se restituye la forma normal del lóbulo de la oreja.
Su resultado es inmediato y permanente, teniendo una duración de entre 15 y 20 minutos. Una vez realizada la intervención, tendrás que esperar entre uno y dos meses antes de volver a perforar el lóbulo, para favorecer una correcta cicatrización de las áreas intervenidas.
Se trata de un procedimiento sin dolor, que no dificulta en absoluto la vida laboral ni social, y que, en las manos de nuestro equipo quirúrgico, consigue un resultado que sólo se puede definir como excelente.